Tomar la palabra

- Agustín Ramos - Sunday, 05 Jan 2020 07:58 Compartir en Facebook Compartir en Google Compartir en Whatsapp

Desde el lado oscuro: Primo Mendoza (II de III)

Más que prólogos, la obra de los escritores del Sótano de los Olvidados tiene zaguanes porque su origen artístico es el lugar común de las vecindades, umbral de reunión, saludo y chisme. En uno de esos zaguanes titulado “Manifiesto malandrín” están los puntos sobre las íes del dinero que no tienen, de la paradoja de ser “ovejas negras” y “orgullo del barrio”, de su escritura “entendible para los diferentes barrios citadinos” y de la creación que los consagrados no reconocen como hija legítima. Refiriéndose en realidad a toda su bibliografía colectiva, “esfuerzo encabronado para publicar”, Los Olvidados declaran: “Los textos que componen este libro presentan la riqueza de posibilidades de crear, recrear e imaginar la realidad a partir de la nada... nos vale madre demostrar si lo que hacemos es artístico o no. Lo que hacemos es un intenso ejercicio…” Otro zaguán, titulado “A la salud crónica de Tepito”, señala los términos que conforman la parte oscura del barrio nómada, las raíces invisibles y sin fronteras de lo andado: “Calles que recorres y transmiten su inexpresable lado oculto; lugares, parques, esquinas donde te rascas la joroba existencial; frentes de casas, callejones, lugares sin pavimento, baldíos con bardas perforadas donde crece la hierba y viven animales fantásticos… Ahí uno siente la mirada de Dios y mira por la cerradura inundada de nostalgia cuando la ciudad se llueve, y es entonces cuando los verbos básicos te fluyen conjugados en pasado” (“Territorios”, de Primo Mendoza Hernández, que abre y da nombre al libro recién reeditado por El BeiSMan en Chicago).

Los territorios son zaguanes ubicuos e imprescindibles donde la voz corre y el alma sobrevive. Ejemplo de zaguán y nomadismo del no menos nómada Alejandro Reyes Arias, “escribividor chiro del oriente citadino”, es “La promesa de Odorina”, cuento sobre una Penélope materna de arrabal bahiano que firmaría el mismísimo Jorge Amado: “Así, conversando en tan amena compañía, [Odorina] entraba a la catedral y se sentaba en el mismo banco de siempre, ni muy cerca ni muy lejos del altar. Desde ahí podía ver claramente la imponente imagen de San Salvador, parado allá arriba, tan lejos del mundo y de sus dolores, reluciendo más esplendoroso que nunca […] Al pasar frente a la iglesia de Nossa Senhora da Coinceição se persignaba, pero no entraba a rezar por el regreso de Prudencio pues no quería perder un minuto para llegar al puerto […] pues, como todos saben, es a Nuestra Señora de la Concepción y no a San Salvador, a quien hay que rezar por aquellos que parten al mar, porque ella es nada menos que Iemanjá, diosa de las aguas…” (Netamorfosis. Cuentos de Tepito y otros barrios marginados).

El territorio cabe en un vaso insondable, en un cabaret de la frontera con eu o entre las cuerdas de un ring: “Uno, dos, tres…, cuatro, cinco, seis… Oigo desde un tiempo en el que me trato de despertar y estoy despierto. La luz es intensa en el centro y disminuye en círculos concéntricos de paulatina oscuridad” (arranque del cuento “Diez”, en Territorios). También en esos territorios abismales se desarrollan “El ídolo en ciernes” de Octavio Famoso Gómez; “La boxeadora”, de Leonor Martínez Salvador y “Ni chicles de mentolín”, de Alejandro López García, que nada le piden a “El Flecha” del colombiano David Sánchez Juliao.

En Tijuana: “Un sax desgarra en sordina Kumbala, las sillas están respaldo con respaldo como muralla de vinil roja que ocultan ambas manos que se cosquillean morosas. La cabeza de El Pony. Juan Bautista de arrabal, yace sobre la mesa donde un vaso bautismal de resacas rueda impulsado por la nada incierta de un tiempo de ebrios. Elia se ladea y abre, llevando la mano de él sobre el ansia de sus muslos…” (“Kumbala”, en Territorios). Hablar de Primo es hablar de sus lugares y su gente, de su lenguaje de alma nómada que posee un territorio múltiple e infinito, y también único.

(Continuará.)

 

 

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