Artes visuales

- Germaine Gómez Haro | [email protected] - Sunday, 01 Aug 2021 00:32 Compartir en Facebook Compartir en Google Compartir en Whatsapp
La escultura de Ángela Gurría: majestuosa y monumental

 

La galería Proyectos Monclova, originalmente ubicada en la colonia Roma, inauguró su espectacular nueva sede en la calle de Lamartine 415, Polanco, en noviembre pasado. Resulta muy atractivo su programa de exhibiciones que alterna artistas mexicanos considerados ya históricos, como es el caso de Helen Escobedo y Fernando García Ponce, con otros de mediana carrera plenamente reconocidos y jóvenes creadores que comienzan a despuntar. Entre los primeros, actualmente se presenta la magna exposición Escuchar la materia, de Ángela Gurría (CDMX, 1926), sin duda una de las escultoras más prominentes de nuestro país desde mediados del siglo pasado.

Gurría se formó inicialmente en Letras Españolas en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. El destacado maestro de Historia del Arte, Justino Fernández, fue uno de los primeros en alentarla a incursionar en la creación escultórica, a pesar de la misoginia del medio de la época. Cuenta Gurría que fue a partir de los ritmos que escuchó en los trabajos de construcción de una obra del arquitecto Manuel Parra cercana a su casa en Coyoacán que se animó a lanzarse a la talla directa: “Comencé a dedicarme a la escultura porque escuché unos canteros trabajar. Comprendí que todo estaba en el cincel y la piedra.” Se inició de manera autodidacta bajo la guía de Germán Cueto, Mario Zamora y el maestro fundidor Abraham González. Su audacia la llevó a inscribirse en un certamen para una obra de encargo bajo un nombre masculino que obtuvo el premio y así dio inicio su deslumbrante carrera que a lo largo de más de cinco décadas ha dejado una huella fundamental y fundacional en la escultura mexicana moderna. Cabe mencionar que fue la primera mujer que ingresó a la Academia de Artes en 1973, es miembro del Salón de la Plástica Mexicana (1966) y Premio Nacional de Ciencias y Artes en el área de Bellas Artes de México (2013). Su quehacer escultórico cuenta con una treintena de obras urbanas de grandes dimensiones ubicadas en espacios públicos en el país y en el extranjero, trabajo monumental de fuerza tectónica que alterna con obras pequeñas de carácter íntimo, cargadas de metáforas y esencias poéticas. Dos obras públicas icónicas son Señal, la Estación #1 de la Ruta de la Amistad ubicada en la glorieta de San Jerónimo y Río Papaloapan, caudal de agua plasmado en hierro instalada a la entrada del Museo de Arte Moderno (MAM).

Escuchar la materia es el título perfecto para esta espléndida exposición, considerando que la artista ha repetido en numerosas ocasiones la importancia de su diálogo con los materiales que explora ‒piedra, mármol, ónix, acero, hierro, aluminio, bronce, plata, madera, barro‒ y que la van guiando en el proceso de acuerdo con sus ritmos y texturas. La muestra hace énfasis en dos de sus temas más recurrentes: la naturaleza y la evocación al universo prehispánico a través de la dicotomía de la vida y la muerte. Ya basta es una pieza que atrapa por la fuerza de su lenguaje sintético que hace alusión a un niño cubierto con la piel del dios desollado Xipe Totec, en señal de protesta por los horrores cometidos por las fuerzas armadas en Chiapas en 1993. La exhibición da inicio con la presentación de documentos que contextualizan la vida y obra de la artista. Recibe al visitante un portentoso retrato pintado por Juan O' Gorman en 1964, en el que nos seduce la elegante figura de la escultora y su atractiva personalidad.

La exhibición está integrada por un centenar de piezas de pequeño formato y majestuosa monumentalidad que revelan una potente expresión emotiva a partir de su capacidad de abstracción; algunas de ellas están acompañadas por sus dibujos preparatorios. La escultura de Ángela Gurría es aire, es fuego, es agua, es viento. Es movimiento y quietud, la fuerza de la naturaleza captada en formas a un tiempo sólidas y volátiles: la sutil unión de los contrarios que da vida y equilibrio al universo.

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