Sobre 'Barbarie'
- - Sunday, 12 Nov 2023 10:08



Aunque Sergio Blanco es más conocido por sus autoficciones, que según sus propias palabras son “el lado oscuro de la autobiografía”, antes de comenzar esa indagación creó una serie de ficciones de la que se desprende Barbarie, una obra que no deja de lado su particular visión de la naturaleza humana.
Barbarie sucede en pleno Océano Glaciar Ártico, donde naufragan siete personajes, en medio de enormes placas de hielo, un lugar que recrea el cuadro El mar de hielo o El naufragio de la Esperanza, de Caspar David Friedrich. Como el pintor del romanticismo alemán impone a los espectadores una lectura metafísica del ambiente, el texto de Sergio Blanco orilla a estos personajes hasta los márgenes de su ser individual y social, a los bordes entre la razón y la locura, entre la humanidad y el salvajismo.
El montaje de Teatro UNAM abre con el cuadro que inspira este drama. Como en una galería de arte, los actores y actrices pasan a verlo, en una introducción sin palabras que contextualiza y propone una lectura esperanzadora de una humanidad sensible ante el arte.
Como en un anuncio del porvenir, en un ambiente tenso por la carencia y las condiciones extremas, esos mismos siete seres humanos no pueden esconder su lado más cruel con tal de sobrevivir, sobrepasando las falaces máscaras sociales.
El permanente juego entre lo que se ve y lo que se esconde a la visión de los espectadores, es una invitación a completar el cuadro a partir de pistas que dan las palabras, los sonidos, la iluminación, para construir sin imágenes una idea de lo más brutal de la humanidad. Los elementos escenográficos reverberan en la simetría gélida de los icebergs convocados en la pintura de Friedrich, el naufragio de la esperanza también en el sentido de la descomposición de lo vital y mucho más de lo social.
¿Hacia donde vamos como especie? Las palabras puestas por Sergio Blanco, intersectadas con la propuesta de dirección y elementos de tridimensionalidad y emoción del montaje de Yee y Teatro UNAM, muestran un veredicto que no parece positivo para la especie, aunque sí para la experiencia estética.